El pasado 11 de diciembre, el CCCB presentó su programación para 2025, una agenda estructurada en torno a una serie de preguntas clave que se adelantan en un teaser: ¿Puede ser un bosque el centro del planeta? ¿Por qué nos conmueven las imágenes? ¿Podemos pensar a través del dibujo? ¿Cuáles son los límites de la especie humana? ¿Por qué seguimos contando historias? ¿Qué significa viajar en el siglo XII? ¿Por qué nos fascina Rodoreda? ¿Cómo se experimenta sobre un escenario? ¿Qué ocurre cuando los jóvenes crean? ¿Un centro cultural puede ser una escuela?
La temporada de exposiciones comienza con la continuación de Amazonias. El futuro ancestral, que inauguró el 13 de noviembre y estará disponible hasta el 4 de mayo de 2025. Comisariada por Claudi Carreras (Barcelona, 1973), esta muestra explora la riqueza cultural y natural de la Amazonia desde la mirada de sus comunidades indígenas. A través de un recorrido sensorial, la exposición aborda los retos ecológicos actuales y reivindica el conocimiento ancestral de los pueblos amazónicos como clave para repensar nuestra relación con la naturaleza.
El ciclo continúa con Dibujar es pensar, un proyecto original de Chris Ware (Omaha, 1967), en colaboración con la Galerie Martel y comisariado por Jordi Costa (Barcelona, 1966). La exposición recorre la trayectoria de este referente del cómic contemporáneo, destacando obras como Jimmy Corrigan y Rusty Brown, que combinan narrativas complejas y sensibilidad humana. A través de originales, animaciones y objetos, se exploran su lenguaje visual, influencias y el impacto de su trabajo en la evolución del cómic como medio artístico.
La programación sigue con En el aire conmovido, una coproducción del CCCB y el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, comisariada por Georges Didi-Huberman (Saint-Étienne, 1953). Basada en los textos de Federico García Lorca sobre el «duende», la exposición explora la emoción como una fuerza transformadora que afecta tanto al individuo como a la comunidad. A través de un montaje dialéctico, se presenta la emoción como una potencia emancipadora, invitando a la reflexión sobre su impacto colectivo en la sociedad.
Posteriormente, se presentará la exposición Mercè Rodoreda. Un bosque, que profundiza en el imaginario de la escritora catalana, explorando la radicalidad de su literatura. A través de un recorrido temático, la muestra presenta los elementos recurrentes en su obra, como el espionaje, la transformación y la muerte, vinculándolos a su poética botánica, poblada de árboles, jardines y elementos naturales. El espacio de la exposición se concibe como un árbol, con raíces que conectan su literatura y el desarraigo del exilio, troncos que representan la guerra, ramas que alcanzan grandes figuras culturales, y semillas que germinan en la imaginación. La muestra incluye documentos originales, materiales históricos y obras contemporáneas inspiradas en Rodoreda, creadas por artistas actuales.
Como es habitual, el año culmina con la 21ª edición de World Press Photo, que presenta las fotografías y producciones ganadoras del concurso más prestigioso de fotoperiodismo. Las obras ofrecen diversas perspectivas sobre la actualidad, organizadas en seis regiones y cuatro categorías: Fotografías individuales, Reportajes fotográficos, Proyectos de larga duración y Formato abierto.
En cuanto a los debates, el programa 2025 aborda temas fundamentales sobre el futuro de la humanidad y la transformación social, desde los avances científicos que cuestionan las fronteras de la vida y el espacio, la cultura y el cambio climático. Se exploran los desarrollos en biotecnología, computación cuántica y la investigación del cosmos, mientras que, en el campo urbano, se reflexiona sobre la sostenibilidad y los efectos del turismo en las ciudades. También se incorporan voces clave sobre el feminismo, la libertad y la resistencia de los pueblos indígenas frente al extractivismo.
En el ámbito de las residencias internacionales, el CCCB invita a tres pensadorxs de renombre a Barcelona cada año para colaborar con la programación del centro y enriquecer la vida cultural de la ciudad. En 2025, las residencias contarán con la presencia de Tsitsi Dangarembga (Mutoko, 1959), escritora y cineasta zimbabuense; Patricia Evangelista (Manila, 1985), periodista filipina; y Yásnaya Aguilar (Oaxaca, 1981), escritora y lingüista mixe. Cada una trabajará en áreas vinculadas a la libertad de expresión, la creación literaria y cinematográfica, y la diversidad lingüística, generando contenidos sonoros y publicaciones que profundizarán en sus reflexiones y acciones.
El CCCB también promueve proyectos de mediación que exploran las relaciones entre el arte, la ciencia, la cultura y la sociedad contemporánea. A través de diversas iniciativas, se invita a repensar la interacción entre los individuos y su entorno, abordando temáticas como la memoria histórica, la ecología, las dinámicas de la juventud y la tecnología. Los programas y actividades incluyen talleres de comisariado, creación colectiva y apoyo a proyectos artísticos que investigan la naturaleza, las relaciones de poder y las conexiones comunitarias, fomentando el diálogo entre disciplinas y abriendo espacios para la creación crítica sobre los retos sociales, ecológicos y digitales actuales.
En cuanto a la experimentación audiovisual, el CCCB ofrece una programación diversa para 2025. Xcèntric inaugura con jornadas sobre archivos queer, celebrando la relación entre cine experimental y movimiento queer, con proyecciones de figuras como Andy Warhol (Pittsburgh, 1928 – Nueva York, 1987) y Barbara Hammer (Los Ángeles, 1939 – Nueva York, 2019). También se destaca el cine experimental hecho por mujeres y el enfoque en la salud mental, incorporando cineastas internacionales como Agnès Varda (Ixelles, 1928 – París, 2019). En colaboración con Dones Visuals, Sinfonías de ciudad encargará a cineastas mujeres un retrato de Barcelona, mientras que el ciclo Visiones Amazónicas presentará cine indígena. Otras actividades incluyen el Animac, el D’A Film Festival, el Brain Film Fest sobre el cerebro, el DocsBarcelona y el +RAIN Film Fest, dedicado al cine generado por inteligencia artificial. Además, el CCCB acoge el festival L’Alternativa y ciclos como los Manifiestos Fílmicos Feministas y Serielizados Fest.
En cuanto a los programas que continúan en 2025, destaca el Programa Social, que busca superar barreras físicas, sensoriales y cognitivas para facilitar el acceso a la cultura a colectivos en riesgo de exclusión, como personas mayores, con discapacidades o en situación de vulnerabilidad. Ofrecen visitas adaptadas, materiales en braille y accesibilidad auditiva, visual y física. Además, colaboran en programas como el de Alzheimer, dirigidos a mejorar el bienestar de personas afectadas por la enfermedad a través de experiencias culturales, y participan en Art Gran, orientado a combatir la soledad no deseada de mayores a través de talleres de arte y cultura. Su compromiso con la accesibilidad también se extiende al ámbito digital, con contenidos como conferencias y entrevistas disponibles en línea.
Con esta variada y ambiciosa programación, el CCCB reafirma su compromiso con la reflexión crítica sobre los grandes desafíos contemporáneos, promoviendo un espacio de diálogo entre arte, ciencia y sociedad, y ofreciendo una plataforma para la creación y el pensamiento a nivel local e internacional.
