14 enero 2025

La Fundació Joan Brossa (Barcelona) presenta su programación de invierno 2025

de

Un viaje interdisciplinario que celebra la experimentación artística, reinterpreta el legado de Joan Brossa y conecta al público con la creación contemporánea a través de performances, exposiciones y talleres

Juana Dolores, 'Qui diu foc, diu flama'. Cortesía de la Fundació Joan Brossa.

La temporada 2024-2025 del Centre de les Arts Lliures de la Fundació Joan Brossa ofrece un extenso programa que fusiona artes vivas, artes visuales y poesía experimental. A través de un diálogo continuo entre el legado de Joan Brossa y las prácticas artísticas contemporáneas, el Centro presenta una variada agenda de actividades que abarcan disciplinas y formatos, desde performances y espectáculos hasta exposiciones y talleres.

Entre las propuestas destacadas se encuentra Exorcismes. Patrimoni i Performativitat, un programa especial que tendrá lugar del 23 al 26 de enero. Este proyecto reúne a artistas de diferentes disciplinas que abordan el patrimonio de Brossa desde enfoques irreverentes y experimentales. Juana Dolores (El Prat de Llobregat, 1992) presentará Qui diu foc, diu flama, una performance que reflexiona sobre la apropiación política y cultural de la obra de Brossa. Has vist l’ombra que acaba de passar pel fons de l’escenari?, de Los Detectives, colectivo compuesto por Mariona Naudin (Barcelona, 1980) y María García Vera (Murcia), explora el legado del poeta desde una perspectiva lúdica y humorística, mientras que Oriol Sauleda (Sant Pol de Mar, 1993) y Arnau Musach (Centelles, 1989) proponen un ritual colectivo de 13 horas titulado La poesia és pels vius, donde invitan al público a participar en una experiencia poética y musical para invocar al espíritu de Brossa.

Alba Rihe, ‘AAAARRGGGHH!!’. Cortesía de la Fundació Joan Brossa.

Otros proyectos dentro de Exorcismes incluyen Dos i la Solfasi Re, de Maria Sevilla (Badalona, 1990) y Eloi el Bon Noi (Barcelona, 1978), que reinterpreta las sextinas de Brossa desde el live coding y la poesía experimental; Cantautot, de Jaume Clotet (Manresa, 1994), un concierto performativo que mezcla humor, música y objetos para generar una experiencia inesperada; y AAAARRGGGHH!!, de Alba Rihe (Granollers, 1988), una propuesta sonora que combina cabaret y distopía en un concierto performativo coral. Por su parte, Júlia Barbany y Núria Corominas (1990) presentarán Pierrot le Fiu, una performance que aborda la depresión y el ridículo desde una estética kitsch y ética drag, mientras que Guillem Llotje llevará a cabo Oint. Gerundi del verb Oir, un trabajo que cuestiona los límites del lenguaje y las reglas del conocimiento a través de una instalación sonora interactiva.

La temporada también destaca por sus conferencias performativas, que redefinen la parateatralidad desde la investigación. Cridaran les pedres, de Urati Lab, indaga en las dinámicas del poder a través de la escenografía medieval; Vot de tenebres. Epíleg, de Joan Morey (Mallorca, 1972), desvela los procesos creativos detrás de su proyecto performativo; y Algo de amor, de Marta Echaves (Madrid, 1990) y Las Huecas, reflexiona sobre la amistad en la era del capitalismo a través de un formato interdisciplinario que combina filosofía, teatro y performance.

Los espectáculos programados este trimestre también capturan la esencia de la experimentación escénica. Mata’m psicosi, dirigido por Lucia del Greco (Roma, 1992) y basado en textos de Dolors Miquel, explora la identidad, la muerte y la fragmentación en un universo poético y bucólico. Weltschmerz (Títol provisional), de Ferran Dordal Lalueza (Barcelona, 1979), aborda la crisis contemporánea y la creación de comunidades disfuncionales pero necesarias.

Laura Moreno Bueno, ‘Cossos Oscil·lants’. Cortesía de la Fundació Joan Brossa.

En el ámbito de las artes visuales, se presentarán dos exposiciones, la ya inaugurada Vot de tenebres, de Joan Morey, que utiliza recursos tecnológicos para explorar temas como el poder, la reclusión y la conectividad desde una perspectiva crítica. Posteriormente se presentará Cossos Oscil·lants, de Laura Moreno (Madrid, 1995), transforma los sonidos del edificio patrimonial de La Seca en una instalación interactiva que conecta el espacio con la memoria histórica y la experiencia del público.

La Escola Brossa, que inaugura su programa de invierno, ofrece cursos que invitan al público a sumergirse en la creación poética y la experimentación interdisciplinaria. El poema no es fa sol, con Maria Sevilla y Raquel Santanera (Manlleu, 1991), conecta lectura y escritura en un ejercicio literario integral, mientras que L’accident poètic, de Tanit Plana (Berga, 1975), explora la relación entre poesía e inteligencia artificial. Otros cursos, como Com un lladre he forçat l’horitzó (II), de Laura G. Ortensi (Roses, 1991), y la masterclass La poesía visual no es visual / El siglo XXI no es el siglo XX, de María Salgado (Madrid, 1984). El proyecto Escola Brossa cuenta además con una serie de actividades para escuelas y estudiantes.

Puedes encontrar más información sobre los proyectos de la temporada y los precios de las actividades en la web de la Fundació Joan Brossa.

Oriol Sauleda, ‘La poesia és pels vius’. Cortesía de la Fundació Joan Brossa.
Redacción

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