El Museu de Pintura Contemporània Can Framis de la Fundació Vila Casas presenta la exposición Carles Gabarró – La fragilidad de la pintura en la època del ‘fast food’ del pintor Carles Gabarró (Barcelona, 1956). La muestra, comisariada por Francesc Puntí, estará disponible del 4 de febrero al 1 de junio. En ella se presenta un recorrido por las diferentes etapas que el artista ha transitado en las últimas cuatro décadas, organizadas en cuatro agrupaciones temáticas que se entrelazan entre sí. Estos capítulos se titulan Magma, Bibliotecas, Fábricas y Camas. A estos se les suma Analogías, un conjunto de su trabajo más reciente.
La trayectoria artística de Gabarró, iniciada en los años ochenta con un enfoque basado en premisas expresionistas, se ha mantenido constante y sin interrupciones hasta el presente. Su aproximación al arte recuerda la labor de un obrero, marcada por el rigor, la constancia y la obstinación. Su obra combina una mirada que es, al mismo tiempo, coherente y dispersa, familiar y enigmática. Aunque comparte ciertos rasgos con los artistas de su generación, su propuesta se aparta deliberadamente de ellos, situándose en un espacio liminal que busca construir una perspectiva personal.
Desarrolla su obra a partir de una iconografía intencionadamente reducida, que se multiplica, transforma y reaparece a lo largo de sus series. Este enfoque ha dado lugar a una especie de “tics” o modos característicos que definen su práctica pictórica. Es el gesto manual el que estructura su pintura, estableciendo relaciones, analogías y metáforas que se mantienen fuera del discurso explícito, en un terreno de indefinición. Precisamente en esta indecisión e irresolubilidad radica la potencia sugestiva de su trabajo.
En la serie Magma (1995-1996), los lienzos se presentan completamente cubiertos por pintura, con pinceladas densas y opacas que generan una intensa sensación de movimiento. Las líneas horizontales y verticales estructuran un flujo visual contenido dentro de los límites del cuadro, sugiriendo una energía que parece querer expandirse más allá del lienzo, atrapando la mirada del espectador. En Bibliotecas (2006-2024), Gabarró desarrolla composiciones que evocan muros impenetrables, superficies cerradas que niegan cualquier acceso directo. El uso simbólico de elementos como cráneos establece un diálogo con las vanitas barrocas.
La serie Fábricas (2009-2015) propone paisajes áridos y fronterizos que oscilan entre lo real y lo imaginario. Estas obras parecen inspirarse en espacios como La Franja o Valderrobres, en Teruel, aunque también funcionan como escenarios introspectivos, representando un paisaje tanto físico como mental. En Camas (2019-2024), el mobiliario cotidiano se convierte en un motivo central cargado de simbolismo. Gabarró utiliza este elemento para explorar dualidades: la cama como espacio de vida, descanso y sexualidad, pero también como territorio de muerte y oscuridad. La representación del objeto subvierte su interpretación habitual, transformándolo en un tema cargado de significados complejos.
Finalmente, en Analogías (2023-2024), Gabarró experimenta con pequeños formatos que combinan abstracción y simbolismo. Estas piezas, con un enfoque más inmediato y ligero, sugieren un equilibrio entre lo conceptual y lo tangible. La pintura parece oscilar entre la idea y la representación, generando un universo visual que es al mismo tiempo real e irreal, familiar y extraño.
Carles Gabarró
Estudió Física y Química en la Universidad de Barcelona, pero tras cinco años en la facultad, decide cambiar de rumbo. Se traslada a París, donde reside dos años y asiste como alumno libre a la École des Beaux-Arts. En 1980 regresa a Barcelona y se matricula en Bellas Artes. Durante estos años consigue su primer estudio en el Raval de Barcelona, abandonando pronto las clases para formarse de manera autodidacta en su taller.
Su primera exposición individual tiene lugar en la Galería Ángel Romero de Madrid (1985). Posteriormente, expone en varias galerías parisinas como Galerie Étienne de Causans (1987-1988), Galerie Arthur (1990-1991) y Galerie Théo de Seine (2014). Desde 1991, expone regularmente en la Galería Maeght de Barcelona.
En 2002 expone en el Instituto Cervantes de Chicago; en 2010, en el Museo Juan Cabré de Calaceite y poco después, en el Centro de Estudios Catalanes de París. En 2011, presenta su obra en el Espai Pere Pruna del Museo de Montserrat; en 2020, en el Espai Guinovart de Agramunt; y, en 2022, en el Centro de Arte Tecla Sala de Hospitalet de Llobregat, localidad donde instala su estudio en 2015 y que mantiene hasta la fecha.
