La galería Juan Silió presenta “misty floors wet skies”, segunda exposición individual de Nora Aurrekoetxea Etxebarria en Madrid. Continuando su investigación sobre la arquitectura del deseo y la arquitectura de lo doméstico, sus últimos trabajos se centran cada vez más en la materialidad de las obras. Muchas de las esculturas de Nora parten de elementos domésticos como colchones, biombos, cortinas, toallas o espacios arquitectónicos como pasillos o escaleras, que le permiten explorar los movimientos y relaciones que estos objetos o espacios demandan. ¿Cómo afectan la forma y el lenguaje a la emoción?, ¿Cuántos y qué tipo de cuerpos excluye y/o invitan la forma? Este aspecto relacional entre el espacio y la postura efímera que el cuerpo se ve obligado a adoptar ante el mobiliario profundiza en su reflexión sobre el (des)equilibrio entre ornamento y función. En “misty floors wet skies” las esculturas se presentan con una composición que obliga a bajar la mirada, una invitación a habitar el suelo, observar las obras que a su vez se doblan, se enrollan o despliegan. El colchón hinchable es un objeto sobre el que ya ha experimentado anteriormente forzando las posibilidades de materiales como el yeso, metal o cemento, trabajando ahora con látex, material que le permite jugar con la idea de “escultura blanda”, el pliegue y el despliegue. Vacío de aire, estos moldes se convierten en piel, un molde negativo, un espacio negativo donde las esculturas adquieren la posibilidad de envolver (se), pero también de expandirse, de quebrarse. De ese modo sitúa la fragilidad como marco de la exposición y propone la vulnerabilidad como la posibilidad del encuentro. Las camas hinchables tienen la capacidad de acoger o expulsar los cuerpos, ocupar y desocupar los espacios. Como esculturas se vacía para plegarse, es al mismo tiempo deforme y formal, quiere tomar el espacio e invitar a otros cuerpos a compartir la horizontalidad desde un punto de vista vertical. La luz se ha convertido en el trabajo de Nora en un elemento que lo atraviesa e inseparable del mismo. Es el elemento sobre el que se ha construido el montaje expositivo que ha comenzado con el espacio oscuro y vacío. La luminaria, en su potencia mínima, se aleja de su funcionalidad y se convierte en otro elemento que dibuja el cielo con una luz tenue que envuelve el espacio y lo divide en dos planos diferenciados – suelos brumosos cielos mojados. Obliga a mirar hacia arriba a unas líneas que acentúan la arquitectura, mientras las paredes de la galería, paradógicamente, se vuelven borrosas, son un horizonte accesorio que parece que ya no soportan ninguna estructura. En esa penumbra una de las obras nos invita a continuar en la planta baja, descender otro plano hasta el almacén de la galería que acoge una instalación donde la subversión de materiales continúa: espuma que se quiebra, plásticos de aire. En la serie Grey plasticos grises de protección de objectos en transporte se formalizan con cinta americana iniciando un juego formal de cuerpos de aire que parten desde lo lúdico. Por el contrario, una gran pieza de foam se erige como un gran cuerpo que resiste los intentos de sustraer formas de ella. Un proceso abierto también presente en el texto que acompaña la exposición que recoge un ejercicio de escritura automática basado en la experiencia de un performer entre las obras. Este ejercicio colaborativo basado en performance y escritura resulta esencial en la metodología de la artista para expandir su práctica escultórica al cuerpo y al lenguaje. Licenciada en Bellas Artes en la Universidad del País Vasco en 2013 y Master en Escultura en el Royal Collage of Art, Nora Aurrekoetxea Etxebarria (Bilbao, 1989) es actualmente es artista residente en Rijksakademie van beeldende kunsten en Amsterdam. También ha sido artista residente en Cité Internationale des Arts (París), Solomon R. Guggenheim (Nueva York), BilbaoArte (Bilbao) y en Paradise Air (Tokio). Ha recibido la Beca de Producción Artística del Gobierno Vasco, la Beca de la Fundación Botín, het cultuurs, AC/E Accion Cultural España y Stichting Elise Mathilde Fonds. Ha recibido premios como ARCO Madrid, Art Situacions III, IX Premio Internacional de Arte MGF, premio Gure Artea y Generaciones 2022. Ha realizado muestras individuales en galerías como Intersticio (Londres) y Juan Silió (Madrid) y en espacios independientes como RacoonProjects (Barcelona) y PA////KT (Amsterdam). Ha participado en numerosas colectivas en galerías como Travesía Cuatro (Guadalajara, México), Hauser & Wirth (Menorca), Pedro Cera (Lisboa), L21(Mallorca) y en instituciones como Fundación Fiminco (París), el Centro Botín (Santander), Ca2m (Madrid 2020), SUPER preview (Londres), HAUS WIEN (Viena), Mutter (Amsterdam), Omstand (Arnhem), Tabakalera (Donostia), La Casa Encendida (Madrid), Museo Guggenheim (Bilbao 2022) y en la Fundación Oteiza (Alzuza 2022), Blue Project (Barcelona). Su obra forma parte de la colección del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, Museo Vasco de Arte Contemporáneo Artium, Fundación Mª José Jove, Fundación ARCO, DKV, museo CA2M, Fundación Botín, entre otras.