Joan Fontcuberta y Pere Formiguera, 'serie Fauna, Cercopithecus icarocornu', 1985. Cortesía de Kutxa Fundazioa.
El pasado 20 de marzo se inauguró la exposición Monstrorum historia del artista, ensayista, docente y comisario, Joan Fontcuberta (Barcelona, 1955), en Kutxa Fundazioa Tabakalera. Disponible hasta el 29 de junio, la muestra, comisariada por Sonia Berger, consta de cuatro proyectos fotográficos que abordan narrativas del mundo natural como la botánica, la biología, la zoología y la paleontología. Dos de estas cuatro series pertenecen a la época pre-digital de la producción del artista, realizadas en la década de los 80; las otras son de realización más reciente, en las cuales introduce obras co-creadas con IA.
A lo largo de su trayectoria, Fontcuberta ha trabajado en torno a la imagen y las potencialidades ficcionales de la fotografía, explorando tanto los límites creativos de esta como los dispositivos tradicionales de transferencia de información visual, con el fin de activar una actitud crítica por parte de lxs espectadorxs. Se ha enfocado en estudiar cómo el pensamiento tecnocientífico influye en la creación y percepción de imágenes, destacando las tensiones que surgen entre la naturaleza, la tecnología, la fotografía y la noción de verdad.
La exposición cuestiona la cultura tecnocientífica mediante un juego, una desviación imaginativa hacia la monstruosidad como espacio fronterizo permeable, que permite hibridaciones, mezclas y encuentros que cuestionan la verosimilitud de lo comprobable. El recorrido propuesto por Berger aborda el trabajo ficcional de Fontcuberta en torno a la fotografía y analiza los cambios en su producción, uso y recepción a lo largo de las décadas, hasta llegar al escenario actual donde el titánico florecimiento, crecimiento desmedido y propagación inexorable de la inteligencia artificial ha reactualizado la duda crítica hacia la imagen.
Monstrorum historia toma su título de un tratado del naturalista italiano Ulisse Aldrovandi (1522-1605) publicado en el año 1642. Incluye, por un lado, Herbarium (1982) y Fauna (1989), dos de los primeros proyectos de Joan Fontcuberta pertenecientes a su etapa predigital; y por otro, HeghDI’ vem ghaH tu’lu’ Dinosaur (2023) y What Darwin Missed (2024), obras recientes en las que incorpora sistemas generativos basados en inteligencia artificial.
Herbarium (1982-85) se presenta como un atlas de especímenes vegetales con formas sorprendentemente inusuales, que homenajea la obra de Karl Blossfeldt, destacado representante de la Nueva Objetividad alemana durante las vanguardias históricas de entreguerras. Además, a modo de contraste, se presenta la serie eHerbarium (2023-24), una serie que rehace las imágenes clásicas de Herbarium utilizando sistemas algorítmicos de visualización generativa, fusionando el imaginario natural con la especulación tecnológica.
La serie Fauna (1985-89) se basa en el archivo atribuido al naturalista Peter Ameisenhauhen, localizado por Joan Fontcuberta y Pere Formiguera durante un viaje a Escocia. Ameisenhauhen dedicó su trabajo a investigar especies animales que plantearan desafíos a la Teoría de la Evolución de Darwin, siendo reconocido por sus estudios en teratología y criptozoología. El archivo incluye fotografías, ilustraciones de campo, mapas, notas manuscritas, grabaciones sonoras y especímenes conservados, que se presentan en un espacio expositivo organizado como un gabinete de curiosidades. Entre los materiales exhibidos figuran descripciones de animales cuya existencia podría ser cuestionada de no estar presente la documentación que los respalda.
HeghDI’ vem ghaH, tu’lu’ Dinosaur (2021-23) plantea una narrativa de ciencia ficción inspirada en el universo de Star Trek. Según la historia, los klingon, una raza en constante conflicto con los humanos por el control de las galaxias, emplearon dinosaurios como animales de compañía. Más tarde, los modificaron genéticamente para convertirlos en armas y enviarlos a la Tierra como parte de un plan de ataque. Sin embargo, los romulanos, enemigos de los klingon, frustraron el proyecto al dirigir un meteorito hacia el planeta, provocando la extinción de los dinosaurios. Fontcuberta incorpora a esta ficción imágenes de fósiles y reproducciones de dinosaurios, tomadas durante sus visitas a parques temáticos y otros espacios, integrándolas en una narrativa que combina lo lúdico con lo especulativo.
La serie What Darwin Missed (2023-24) toma como punto de partida la figura de Charles Darwin y su trabajo durante la expedición del Beagle. En 1835, Darwin pasó tres semanas en las Islas Galápagos, donde recolectó muestras de corales que contribuyeron al desarrollo de sus teorías. Casi dos siglos después, Joan Fontcuberta vuelve a las Galápagos para documentar especies de coral que Darwin no llegó a registrar, como la recientemente identificada Cryptocnidaria. Las fotografías capturan la complejidad y fragilidad de estas formas de vida marina, muchas de las cuales enfrentan serias amenazas para su supervivencia.
En lugar de un catálogo convencional, a esta exhibición la acompaña la publicación de un libro de ensayos del propio Fontcuberta titulado Imágenes latentes. La fotografía en transición. Además la exposición cuenta con visitas guiadas gratuitas todos los domingos en euskera a las 17:30 y en castellano a las 18:30, talleres familiares y diálogos, a los que te puedes inscribir en la web de Kutxa Fundazioa.
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