Pasillos de ARCOmadrid 2022. Cortesía de ARCOmadrid.
Tras la edición extraordinaria del pasado mes de julio de 2021 -marcada por un clima aún incierto, debido a la pandemia-, ARCOmadrid celebra sus 40 años (+1) de actividad con una edición caracterizada por una ilusión renovada y las ganas de compartir un espacio de encuentro seguro.
Con 185 galerías participantes (casi 60 más que el año pasado) y varias secciones especiales, la feria se confirma como cita imprescindible en el calendario artístico internacional y en el mercado del arte en España -basta con pensar que el 60% de las ventas anuales en el territorio nacional se concentran durante la semana de la feria madrileña.
La directora del evento, Maribel López, afirma que «ARCO goza de muy buena salud», y las largas colas para ingresar a la feria parecen hacerle eco, con un número de visitantes que regresa a los estándares pre-pandemia. Entre ellos, 350 son coleccionistas y 200 profesionales del arte invitados por la feria a participar en un amplio programa de visitas y actividades.
Empresas privadas e instituciones públicas tanto internacionales como nacionales -incluida la Comunidad de Madrid- se suman a las iniciativas para impulsar adquisiciones mediante distintos tipos de premios, tras una edición (la de julio de 2021) en la que el número total de reconocimientos había disminuido considerablemente. Algunos están destinados a la producción de obras; otros, en cambio, premian las propuestas expuestas. Todos ellos tienen en común la voluntad de apoyar a un sector muy complejo, aunque cada uno en línea con la misión de su empresa o institución representativa.
Entre las diversas iniciativas de este tipo destacan las adquisiciones públicas del Ministerio de Cultura y Deporte de la ciudad de Madrid, que ha comprado obras destinadas a la colección del Museo Nacional de Arte Reina Sofía por un total de 370.000 euros. Se trata de 16 obras de 15 artistas – 10 de estos españoles: Miguel Benllonch (Granada, 1954 – Sevilla, 2018), Antoni Campañà (Arbucias, 1906 – San Cugat del Vallés, 1989), Patricia Esquivias (Caracas, 1979), Eva Fàbregas (Barcelona, 1988), Patricia Gómez (Valencia, 1978) y Maria Jesús González (Valencia, 1978), Federico Guzmán (Sevilla, 1964), Agustín Ibarrola (Basauri, Vizcaya, 18 de agosto de 1930), Concha Jerez (Las Palmas de Gran Canaria, 1941), Antoni Miralda (Terrassa, Barcelona, 1942), Maria Thereza Alves (São Paulo, 1961), Marwa Arsanios (Beirut, 1978), Cecilia Bengolea (Buenos Aires, 1979), Cian Dayrit (Manila, Filipinas, 1989) y Santiago Yahuarcani (Perú, 1961).
El Premio fue creado en 2004 con el objetivo de reconocer la mejor obra presentada en la feria por un artista menor de 40 años. Además, el precio no debe superar los 35.000 euros. La Comunidad de Madrid adquiere la obra premiada que pasa, así, a formar parte de la colección del Museo Centro de arte Dos de Mayo de Móstoles.
El jurado estuvo compuesto por Marta Rincón (historiadora del arte y gestora cultural), Armando Montesinos (especialista en arte contemporáneo y comisario independiente), Manuel Segade (director del Museo Centro de arte Dos de Mayo), Tania Pardo Pérez (Concejala de Artes Plásticas de la Consejería de Cultura y Turismo de la Comunidad de Madrid y Subdirectora del Museo Centro de arte Dos de Mayo), Asunción Cardona Suanzes (Subdirectora General de Bellas Artes de la Comunidad de Madrid) y Gonzalo Cabrera Martín (Director General de Promoción Cultural de la Consejería de Cultura, Turismo y Deporte de la Comunidad de Madrid).
Los premiados fueron: Cristina Mejías (Jerez de la Frontera, 1986) con la obra Knot the Tongue, Grasp a Stream II (2021), presentada por la Galería Rodríguez; Sol Calero (Caracas, Venezuela, 1982) con las obras Mesa Servida (2022) y Silla Isadora (2019) presentadas por Chert Lüde Gallery; Edison Peñafiel (Ecuador, 1985) con Mare Magnvm-Navis I (2022) presentada por la Galería Sabrina Amrani.
El Premio Cerveza Alhambra de Arte Emergente está dirigido a artistas emergentes del panorama nacional español. La iniciativa pretende destacar obras inéditas que trasladen el espíritu de la marca a través de un proceso de producción artesanal, reinterpretado en clave contemporánea, con la Alhambra y Granada como puntos de partida.
Un jurado internacional compuesto por Alicia Ventura (historiadora del arte, Colección DKV), Iñaki Martínez (comisario independiente), Beatriz Herráez (directora de Artium), Rocío Díaz Jiménez (Directora General del Patronato de Alhambra y Generalife) y Álvaro Trujillo (Territory Brand Manager de Cervezas Alhambra) seleccionó a 5 artistas finalistas, que tuvieron la oportunidad de presentar una nueva producción en el stand de Cervezas Alhambra: Álvaro Albaladejo (Granada, 1983), Nadia Barkate (Bilbao, 1980), Laia Estruch Mata (Barcelona, 1981) Fuentesal y Arenillas (Julia Fuentesal y Pablo M. Arenillas) y Lois Patiño (Vigo, 1983).
La obra ganadora del concurso fue Zócalo de la artista catalana Laia Estruch Mata, realizada en colaboración con el artesano Eloi Bonadona. Se trata de una estructura cilíndrica de cerámica, basada en la tradición alfarera local del municipio de Quart en Girona, que recuerda a un instrumento de viento y que parte de las cubiertas perforadas y abovedadas de las termas del Palacio Comares, en la Alhambra.
Con motivo de la decimoquinta edición del Premio Illy SustainArt –para artistas latinoamericanos nacidos después de 1981 y provenientes de países productores de café–, un jurado formado por Patrizia Sandretto Re Rebaudengo (coleccionista y fundadora de la Fundación Sandretto Re Rebaudengo en Turín), Catalina Lozano (curadora independiente), Pily Estrada (curadora y agregada cultural de la embajada de Ecuador en París) y Carlo Bach (Director de Arte de illycaffè) otorgaron un premio de 15.000 euros a la artista Ana Navas (Quito, Ecuador, 1989), representada por la galería alemana Sperling (Mónaco), con el invito a seguir desarrollando su trabajo.
Nacida en Quito pero criada en Venezuela, Navas investiga la genealogía de los objetos combinando varias formas de arte, como la escultura, el video, la pintura y la performance. La joven artista, que actualmente vive y trabaja en Róterdam, utiliza un enfoque histórico y ficticio para cuestionar la relación entre forma y función, entre «original» y «copia», en objetos cotidianos y aparentemente inofensivos.
Lexus participa en la feria por segundo año consecutivo y premia la galería argentina Rolf Art (Buenos Aires) con una dotación de 10.000 euros. La galería presentaba obras de Marcelo Brodsky (Argentina, 1954), Sara Facio (San Isidro, 1932) y Andrés Denegri (Buenos Aires, 1975). El jurado estuvo compuesto por Estrella de Diego (ensayista y profesora de la Universidad Complutense de Madrid) y José Luis Blondet (comisario de proyectos especiales del LACMA de Los Ángeles).
Con motivo de su decimoséptima edición, el Premio Beep de Arte Electrónico ha recaído este año en la obra colectiva Echo, presentada en el stand de la galería catalana àngels barcelona y creada por Lúa Coderch (Iquitos, Perú, 1982), Julia Múgica (México), Lluís Nacenta (1976, Barcelona) e Iván Paz (Ciudad de México, 1978). El jurado integrado por Fernando Castro Flórez, Marie-France Veyrat, Roberta Bosco y Vicente Matallana valoró la reinterpretación contemporánea del mito de la ninfa Eco, materializado en un objeto posthumano junto al que se exhibe un taburete para permitir la interacción con el espectador. Los autores de la obra subrayan cómo la pieza funcione como un cuerpo entre cuerpos, destacando nuestra común dificultad para entender lo que se nos dice.
Para la octava edición del Premio Opening by Allianz, un jurado compuesto por Yina Jimenez (curadora de Carribean Art Iniciative), Adeena Mey (Editora Gerente de Afterall), Claudia Segura (curadora, MACBA Barcelona) y Bernardo Mosqueira (Becario Curatorial del Islaa New Museum) decidió que el mejor stand presentado en la sección Opening by Allianz fuera el de la galería milanesa East Contemporary, con el dúo de artistas Nour Jaouda (Libia) + Ania Bak. El jurado destacó el fuerte carácter curatorial de la propuesta, poderosa tanto desde un punto de vista político como estético.
Pero la obra que realmente dio a hablar en esta sección –que contaba con la participación de 15 galerías nacionales e internacionales con una actividad de menos de siete años–, fue la obra de la joven artista peruana Wynnie Minerva (1991) presentada por la galería Ginsberg de Lima. Compuesta por un gran mural y un video, Cerrar para abrir explora la representación del cuerpo en una sociedad patriarcal y se convierte en un vehículo para que Minerva manifieste su identidad no binaria.
Patrocinado gracias a la aportación de Marcel Pascual, presidente de Honda Greens Power Products, con una dotación de 15.000 euros, el premio fue otorgado a la artista Asunción Molinos Gordo (Aranda de Duero, Burgos, 1979) representada por la galería madrileña Travesía Cuatro. El jurado identificó la propuesta de Molinos Gordo como la mejor de todas las que estaban expuestas en la feria.
El premio Martin Miller’s Gin fue otorgado a la artista Marta Palau (Albesa, Lleida, 1934) representada por la galería Walden de Buenos Aires. Formaban parte del jurado Rosa Ferrer (directora, Matadero Madrid), Andrea Bellini (director, Centre d’Art Contemporain de Ginebra), Maribel López (directora, ARCOmadrid), y el equipo de Martin Miller’s Gin integrado por Carlos Granja y Carolina Sanz. Marta Palau es una artista española, nacionalizada mexicana, reconocida en el panorama artístico internacional por sus tapices. A lo largo de su carrera, ha utilizado los textiles para desarrollar una forma de expresión artística única: acercarse a los materiales para repensar tanto lo pictórico como lo escultórico.
El premio nació de una iniciativa privada para apoyar el arte contemporáneo en el marco de la feria ARCOmadrid, y fue lanzado en 2017 por la diseñadora madrileña Catalina d’Anglade. Cuando nuestros ojos se tocan (2020) de June Crespo (Pamplona, 1982), es el título de la obra ganadora, expuesta en el stand de la galería Bilbao Carreras Múgica. La segunda parte del premio supone el desarrollo, a lo largo del año, de un proyecto inédito de la artista que combinará arte y diseño en una obra seriada pensada para acercar el arte a nuevos públicos.
No faltaron los premios al coleccionismo. A través de los Premios “A”, la Fundación ARCO reconoció este año el trabajo de seis colecciones: la Colección Daniel y Mirella Levinas; la Fundación María Cristina Masaveu Peterson; la Colección Susana y Ricardo Steinbruch; la Colección de la Fundación Otazu; la Colección Engel y la Colección Erling Kagge. Este premio reconoce el valor artístico de colecciones vinculadas a iniciativas privadas e instituciones públicas, así como su labor de apoyo a la difusión del arte contemporáneo.
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