exibart.es

Tras la adquisición de la marca Art Basel, el magnate James Murdoch invierte en el mercado de las criptomonedas, apoyando el desarrollo de BCA – Blockchain.art, para un mercado NFT accesible.

Hasta hace poco, de la blockchain, las criptomonedas y los tokens se hablaba tímidamente  y sólo en determinados contextos. Pero últimamente el tema ha perdido esa aura un poco nerd, para adquirir una mucho más brillante: la misma tonalidad dorada de los 25 millones de dólares generados por «The Currency Project», proyecto NFT de Damien Hirst que ha puesto a la venta una serie de 10 mil obras explotando la tecnología blockchain, triunfando así en el cripto-mercado del arte. Pero quien verdaderamente destigmatizó el asunto fue Beeple (1981), también conocido como Michael Joseph Winkelmann – artista digital autor de la obra NFT Everydays: The First 5000 Days (2021), vendida por Christie’s por el monstruoso precio de 69,3 millones de dólares. Para resumir, cuando huele a negocio, aquellos que suelen seguirlo no pueden perder la oportunidad. Y entre los sabuesos más implacables se encuentra sin duda James Murdoch, el hijo menor del magnate de los medios Rupert, que acaba de invertir una cantidad no especificada para apoyar el desarrollo de BCA – Blockchain.art.

La inversión de Murdoch en el arte NFT y el caso italiano

Se trata de una plataforma dedicada al arte NFT, fundada en 2019 – en tiempos no sospechosos-, por Christina Steinbrecher-Pfandt (cofundadora de viennacontemporary, feria internacional de arte contemporáneo que se celebra en la capital austriaca desde 2015). Es importante recordar que los NFTs son activos encriptados únicos, identificados a través de la tecnología blockchain y relacionados con un objeto – una obra de arte, en este caso específico, de cualquier formato y consistencia: desde GIFs y cliparts hasta llegar a pinturas y esculturas. Como una «firma de artista» que no se puede replicar y cuyos posibles cambios de titularidad quedan registrados en la blockchain de referencia – que puede cambiar en función de la criptomoneda en la que se ha registrado la pieza NFT, ya sea Ethereum o Bitcoin -, sin la necesidad de intervención de otros garantes.

BCA ha sido el primer mercado NFT diseñado y construido específicamente para las necesidades del mundo del arte criptográfico. Hay muchos otros, por ejemplo OpenSea y Palm, el mismo que usa Damien Hirst. Pero BCA se beneficia de dos socios ambiciosos y ricos: Lupa Systems, una empresa de inversión privada, fundada por Rupert Murdoch en 2019, y Betaworks, una plataforma incubadora de empresas emergentes dedicadas a la innovación tecnológica, a su vez respaldada por Murdoch. Una empresa hambrienta (nomen omen): a finales del año pasado, tras meses de negociaciones, Lupa Systems fue oficialmente aprobada como nueva accionista principal del Grupo MCH, propietaria de la marca ferial Art Basel. Lupa Systems ahora participa con el 49% en la sociedad dedicada a la producción de eventos. 

La coincidencia totalmente italiana también es interesante. Unas semanas después de la inauguración, Artissima anunció el lanzamiento de Surfing NFT, el primer proyecto de la nueva plataforma Beyond Production, creada junto con la Fundación de Arte Moderno y Contemporáneo CRT, con la colaboración del Premio OGR y la participación de profesionales de la industria como Artshell y LCA. El objetivo del proyecto es invitar a los artistas a experimentar la producción de una obra NFT. En un momento en el que muchas grandes galerías dudan si aventurarse o no en este sector específico, es significativo que una feria haya allanado el camino.

Y ahora, la aparición de Murdoch, que tiene la responsabilidad de relanzar una entera manifestación ferial, tras la crisis de la Covid-19. Como primer, el equipo de BCA ha participado en el programa de puesta en marcha de Betaworks, llamado «Betacamp», que se centra en el tema “Fix the Internet» – o sea: “Repara Internet.” «Hemos visto muchos mercados NFT y son interesantes. Pero esta es la primera empresa que realmente reúne a personas con experiencia en el mundo del arte y expertos en blockchain. Unir estos dos puntos de vista diferentes fue lo que realmente nos importaba para esta inversión.», dijo Danika Laszuk, gerente general de Betaworks (¿una referencia al «Código de mil millones de dólares» de Terravision?).

Un mercado para casi todos

Actualmente, BCA está trabajando en su propia cadena en el ecosistema Polkadot, como competidor de Ethereum, la criptomoneda más utilizada en el mercado del arte. Polkadot permite el intercambio de una gama más amplia de activos y, en general, se considera más sostenible que muchas otras plataformas comparables. Esta nueva tecnología debería premiar la accesibilidad, incluso para usuarios menos inteligentes.

Actualmente no todos los coleccionistas pueden abrir su cartera criptográfica y algunas galerías más prudentes están corriendo para cubrirse, lo que permite a sus clientes pagar con la moneda de acuñación antigua y cara, y luego gestionan el paso de todas las transacciones en la blockchain. En un sector donde la confianza juega un papel fundamental, poder garantizar la transparencia a sus usuarios se convierte en un factor decisivo. Y si detrás de ti hay un gigante como Murdoch, significa que algo grande está hirviendo en la olla.